Cuando se esta mal
¿Qué diferencia existe entre ser listo y ser rápidamente inteligente? Para mí, el que es inteligente probablemente no lo puede ser rápidamente sino a la larga o viceversa. Ser listo no va de la mano con ser inteligente ni ser brillante va junto a ser listo.
Si alguna vez alguien al pasar se da cuenta de cómo eres realmente tú, déjalo que decida estar contigo sin importar cuán listo o brillante eres o si eres ambos, inclusive.
Que las buenas fuerzas divinas del viento me perdonen mi redundancia pero sentirse en algunas de las situaciones antes descritas es desagradable; duele mucho; sobre todo si viene de alguien tan allegado a ti.
Ojalá pueda verme a mi mismo cantando al mundo a voces lo que pueda vivir, verme en fotos disfrutando de un bello paisaje de acá o de allá y cuando esté viejo decir, ¡qué divinos aquellos momentos¡ y que me hijos pregunten ¿Háblame de ese lugar?
No pido ser admirado sino aceptado. No les pido que me quieran sino que hasta llegue a no importarles.
Tengo unas inmensas ganas de saltar al vacío de mi mundo incomprensible para que no crean nada de mí o trepar en sus labios para que me de tranquilidad sin ser juzgado por sus palabras que parecen dagas filosamente pensadas.
No me decido si estar aquí o allá para que veas mi cara de tonto. En la campiña de mis pensamientos sólo hay flores para aquella que ya está pero que lamentablemente está decepcionada de mi sin yo hacer nada en su contra, ¿qué triste, no?
Sentir que la soledad puede estar tan cerca duele a veces porque es capaz de cubrirme totalmente. Ya la he sentido y lo único provechoso es que a partir de ella se pueden escribir cosas increíbles, viscerales, de esas que saben tan divino como para llorar y secarse con ellas mismas.
Es mejor irse, ya debo irme. El lago esta comenzado a llenarse y si no consigo un aliviadero puedo desbordarme. Si consigo una canoa lo suficientemente segura me monto y si no me sirve estando adentro prefiero arrojarme a mi mismo al agua, sin importar nadar mucho y cansarme.
Si alguna vez alguien al pasar se da cuenta de cómo eres realmente tú, déjalo que decida estar contigo sin importar cuán listo o brillante eres o si eres ambos, inclusive.
Que las buenas fuerzas divinas del viento me perdonen mi redundancia pero sentirse en algunas de las situaciones antes descritas es desagradable; duele mucho; sobre todo si viene de alguien tan allegado a ti.
Ojalá pueda verme a mi mismo cantando al mundo a voces lo que pueda vivir, verme en fotos disfrutando de un bello paisaje de acá o de allá y cuando esté viejo decir, ¡qué divinos aquellos momentos¡ y que me hijos pregunten ¿Háblame de ese lugar?
No pido ser admirado sino aceptado. No les pido que me quieran sino que hasta llegue a no importarles.
Tengo unas inmensas ganas de saltar al vacío de mi mundo incomprensible para que no crean nada de mí o trepar en sus labios para que me de tranquilidad sin ser juzgado por sus palabras que parecen dagas filosamente pensadas.
No me decido si estar aquí o allá para que veas mi cara de tonto. En la campiña de mis pensamientos sólo hay flores para aquella que ya está pero que lamentablemente está decepcionada de mi sin yo hacer nada en su contra, ¿qué triste, no?
Sentir que la soledad puede estar tan cerca duele a veces porque es capaz de cubrirme totalmente. Ya la he sentido y lo único provechoso es que a partir de ella se pueden escribir cosas increíbles, viscerales, de esas que saben tan divino como para llorar y secarse con ellas mismas.
Es mejor irse, ya debo irme. El lago esta comenzado a llenarse y si no consigo un aliviadero puedo desbordarme. Si consigo una canoa lo suficientemente segura me monto y si no me sirve estando adentro prefiero arrojarme a mi mismo al agua, sin importar nadar mucho y cansarme.
